Creí con la creencia de los santos,
me pregunté
qué cosa es el amor.

¿Y la soledad y el dolor, esos pájaros nocturnos
que nos lanzan
a la hiriente
boca
de la hiena?

Amé creyendo en el abandono,
vi los cisnes dejar su estela,
el lago congelarse.

Vi encenderse
los lirios
bajo el fresno desnudo,
desnuda yo
sobre la tarde.